El Dr. Spoiler y Mr. Hype toman café y huevos con beicon en la clásica cafetería americana de las películas.
DR. SPOILER: ¿Los 6 ridículos dos veces?
MR. HYPE: La primera por capricho, con mi esposa, y la segunda con sus sobrinas.
DR. SPOILER: ¿Cómo soportó eso?
MR. HYPE: Se equivoca, Dr. Spoiler: me reí las dos veces.
DR. SPOILER: ¿Me toma el pelo?
MR. HYPE: En absoluto.
DR. SPOILER: Pero es una basura: infantiloide, con chistes zafios y ¿qué me dice de los actores? Harvey Keitel y Steve Buscemi están desaprovechados.
MR. HYPE: Se trata de una comedia absurda, Dr. Spoiler. ¿Qué espera de los actores?
DR. SPOILER: ¡Netflix no puede permitirse esas cosas!
MR. HYPE: Los 6 ridículos ha sido lo más más visto en Netflix desde su estreno.
DR. SPOILER: ¿Y qué? A ningún crítico le ha gustado…
La camarera se acerca con la cafetera y sonríe. El Dr. Spoiler niega con la cabeza.
MR. HYPE: Sí, gracias.
La camarera rellena la taza de Mr. Hype y se marcha.
MR. HYPE: ¿Sabe usted quién es William Goldman?
DR. SPOILER: No me insulte, Mr. Hype, ¡claro que lo sé! El guionista de Harper, investigador privado, Dos hombres y un destino…
MR. HYPE: … Marathon Man, La princesa prometida y adaptó Todos los hombres del presidente. Convendrá conmigo que Goldman es un tipo serio.
DR. SPOILER: Lo parece.
MR. HYPE: ¿Ha leído Las nuevas aventuras de un guionista en Hollywood de Goldman?
DR. SPOILER: […]
MR. HYPE: Goldman escribe sobre el arte de guion y menciona varias veces a Bergman. Goldman adora a Bergman, sobre todo El silencio.
DR. SPOILER: Magnífica.
MR. HYPE: Pues Goldman también admira a los hermanos Farrelly.
DR. SPOILER: No me diga eso.
MR. HYPE: Se lo digo, se lo digo: cómprese el libro. Incluso entrevista a los hermanos.
Dr. Spoiler alza la mano y llama a la camarera. La camarera mira. Dr. Spoiler.
DR. SPOILER: Cuando pueda, traiga más café… y un croissant. ¿Y usted?
MR. HYPE: Nada, gracias. Le decía que antes de la entrevista a los Farrelly, Goldman escribe que a los críticos no les gustan las comedias porque no pueden evaluarla como cualquier otra película.
DR. SPOILER: No me compare a Billy Wilder con…
MR. HYPE: Que unas comedias tienen más valores cinematográficos que otras comedias no lo discuto, pero al margen de esto, las comedias hacen gracia o no la hacen.
DR. SPOILER: A mí no me hace gracia Adam Sandler ni los apellidos vascos…
MR. HYPE: Ese es su problema.
DR. SPOILER: ¿Pero puedo decir que algo no me hace gracia?
MR. HYPE: Dígalo si le place. A mí hay cosas que no me hacen gracia. Pero que algo no haga gracia no significa que el chiste sea malo. Puede decir de una comedia que la fotografía es mala, la realización torpe o que el vestuario está mal diseñado o es anacrónico, cosas que a los espectadores de comedias no les importan tanto, pero no puede decir si los chistes son malos o no. El humor aparece cuando el creador y el público manejan un código común. Los Youtubers que tanta gracia hacen a los adolescentes y preadolescentes no hacen gracia a los padres ni a usted ni a mí porque los adultos no manejamos el mismo código; no pillamos las referencias.
Llega la camarera con el café y el croissant. Sirve y se va.
DR. SPOILER: Gracias.
La camarera sonríe.
MR. HYPE: El problema de los críticos es que la comedia no siempre es refinada: puede ser de mal gusto, escatológica, irreverente… o tonta. ¿Qué pasa? A los críticos les molesta ser humanos. ¿Cómo pueden decir que se han reído con un chiste tonto? ¿Cómo pueden decir que se han reído de algo que va contra las normas establecidas? Piense en La fiera de mi niña.
DR. SPOILER: ¡El mejor exponente de la screwball comedy!
MR. HYPE: … pero los críticos la vapulearon en su momento. A los críticos no les gustó el carácter fuerte del personaje de Katharine Hepburn. No aceptaron que Cary Grant se dejara arrastrar a la aventura por Hepburn. Las reposiciones en televisión ha hecho mucho bien por esta película.
DR. SPOILER: Pero, insisto, no compare Los 6 ridículos con La fiera de mi niña.
MR. HYPE: No comparo. Tan solo le digo que a los críticos profesionales y a los críticos aficionados, los que ponen estrellitas en ciertas páginas, a todos estos les da miedo que el público ría y ser parte del público. Como si lo popular debiera ser demonizado. La película de Sandler ha tenido críticas demasiado largas y con inquina. A uno le parece que aquí hay una cruzada en contra como la que emprendió el bibliotecario Jorge de Burgos.
DR. SPOILER: ¿Jorge de Burgos?
MR. HYPE: El bibliotecario ciego de El nombre de rosa: el que teme que si se encuentra el libro de la risa de Aristóteles, los hombres acaben riéndose de todo, sobre todo de la autoridad.
DR. SPOILER: ¿Me considera un inquisidor?
MR. HYPE: No exagere, hombre.
Toman un sorbo de café cada uno.
MR. HYPE: Si se fija, quiénes critican con saña películas como Los 6 ridículos son jóvenes que creen que al hacerlo pueden pasar por intelectuales o esos críticos rancios que no pudieron llegar a otra cosa.
DR. SPOILER: Para usted la peseta, Mr. Hype.
MR. HYPE: No se enfade. Lo que sí convendrá conmigo es que Adam Sandler no estafa: cuando nos disponemos a ver una película suya intuimos qué veremos.
DR. SPOILER: Aquí me dirá lo de Godard y que el cine americano no estafa.
MR. HYPE (con una sonrisa): Le invito.
