Si creéis que forzáis la capacidad de superación del ser humano cada vez que vais un rato al gimnasio, esperad a conocer a nuestros siguientes protagonistas. Estos hombres y mujeres de todo el mundo han decidido que lo mejor que pueden hacer un mes de diciembre cualquiera es competir en la Talisker Whisky Atlantic Challenge. Es decir, cruzarse el Océano Atlántico remando. La prueba comienza hoy mismo.
Visto en frío, la cosa parece más propia de superhéroes que de personas normales: sin ayuda, sin motores, sin ni siquiera comida: un bote con remos, un desalador de agua, aparejos para la pesca y 3000 millas náuticas por delante. Desde San Sebastián de La Gomera, en las Islas Canarias, hasta el puerto Nelson en la isla caribeña de Antigua. Si, por lo que sea, necesitan ayuda, quedarán descalificados.
En esta edición participan 16 equipos provenientes de todo el mundo, aunque son mayoría los de origen británico. Por primera vez participa una pareja española (Emilio Fernández y José Ángel García), y, aunque el reto principal es llegar hasta Antigua, la competición es feroz. El record a batir es de 30 días, aunque la duración más habitual ronda entre los 40 y los 90 días de prueba. Los equipos participantes a menudo aprovechan la carrera para defender causas solidarias. Es el caso de Row2Recovery, un equipo formado por dos soldados que han sufrido alguna discapacidad en la guerra. Su propósito, aparte de terminar, es reunir fondos para la fundación Help For Heroes.
La edición de 2011 (es bianual) tuvo como ganadores a los británicos Toby Iles y Nick Moore, con un tiempo de 40 días y 9 horas. Lo curioso es que el segundo clasificado, Andrew Brown, llegó tan solo 25 minutos más tarde, y con la dificultad añadida de hacerlo él solo. De locos, vaya.