El kit de desobediencia escolar

27 de septiembre de 2012
27 de septiembre de 2012
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No enciendan las alarmas. No se trata de oponer resistencia a lo que los profesores proponen a los alumnos en la escuela. Se trata de todo lo contrario, de proponer, de adoptar una actitud creativa y proactiva e impulsar un cambio en las aulas. ¿Cómo? Saliendo a la calle a aprovechar la movilidad que permite la tecnología hoy en día. Os mostramos una manera de hacerlo.

(Advertorial)

Muchos tenemos aún fresca la sensación de encierro en la biblioteca del instituto o la facultad. Nuestros padres se mostraban tranquilos si sabían que estábamos encerrados entre estantería repletas de libros. En la mayor parte de casos no les faltaba razón, pero es hora de cambiar los paradigmas. Hay lugares tan inspiradores o más para aprender y se puede hacer de manera activa. Lo que proponemos es construir un kit tecnológico para derribar los muros y llevar nuestra propia biblioteca con nosotros, contar siempre con la posibilidad de seguir aprendiendo y ofrecer cosas nuevas a los profesores.

El equipo básico se empezaría a construir con un ordenador portátil. Medion dispone de una gama ajustada a cualquier necesidad y exigencia, desde el usuario que únicamente necesita funciones básicas de conectividad a la red y ofimática hasta aquellos que son más dados a trabajar con una alta carga gráfica, ya sea con fotografías, vídeos o animación.

En segundo lugar, la conectividad móvil en su máxima expresión se materializa hoy en día a través de los smartphones. El terminal más disruptivo de los últimos años, el iPhone, lanza nueva versión en España y estará, por supuesto, disponible en K-Tuin. El iPhone 5, además de su gran rendimiento como hub de conexión a la red, ya sea desde un punto de vista informativo o desde uno social, cuenta con unas capacidades multimedia que permiten que todo los trabajos que queramos plantear para nuestro curso puedan verse enriquecidos de manera notable.

¿Por qué no proponer a nuestros profesores un blog como medio de expresión y trabajo que incluya, más allá del contenido escrito, multitud de elementos multimedia en forma de audio, foto o vídeo? ¿Por qué no mantener el contacto con nuestros compañeros y tutores mediante las redes sociales, creando entornos de trabajo colaborativo? La idea pasa por abandonar el trabajo individual y aprender a resolver problemas de manera colectiva y altruista.

Por último, en la mochila de cualquier alumno no pueden faltar los libros. El tiempo en el que las espaldas sufrían los rigores del peso de la ridícula cantidad de libros de texto que había que cargar simultáneamente podría llegar a su fin. Un solo ebook es capaz de recopilar toda la bibliografía necesaria para que un alumno recorra toda su trayectoria educativa, desde su entrada en primaria hasta su graduación. Pixmania ofrece un surtido que supera con creces el medio centenar de modelos.

Bibliografía, conectividad y movilidad son las tres patas sobre las que un alumno debe apoyarse para los retos educativos de la próxima década. Y si los profesores no son los que proponen modelos basados en esos conceptos, deberían ser los propios estudiantes los que ejerzan la presión necesaria para abandonar caducos modelos de aprendizaje. ¿Estamos preparados para ese reto?

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