En el Ojo Ajeno: ¡Se me escapan los caracoles!

14 de octubre de 2010
14 de octubre de 2010
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Hablaba este fin de semana con mi amigo Germán y sus barbas sobre lo innecesario de la mitad de lo que consumimos. Yo le decía que no hace tanto que pasé por el aro de la tele plana y ya estoy anticuado. Esperé a comprar una con TDT, pero el maldito TDT no era HD, carajo. Pero es que hasta hace nada no había ni síntomas de la bromita de la emisión en alta definición. Ahora re-necesito una con ¿tecnología Led? ¿3D? o ¿me espero a las 3D sin gafas que ya se anuncian?

Tengo una cámara Canon G9, buque insignia de las compactas no hace ni 2 años, y me siento como un perdedor porque ya vamos por la G12. Así que estoy sopesando comprarme una réflex, una Eos 550D, pero acabo de saber que sale en noviembre la 60D que es mejor. Así que no hago más que esperar a algo… ¿Y el Ipad? ¿de verdad lo vas a comprar sin cámara?

No hablo del dolor de corazón cuando tuve que deshacerme de mis cassettes… pero eso era un tema generacional. Hablo de que ahora los ciclos son de meses en el mejor de los casos.

Acaban de salir varios modelos de coches híbridos. ¿Tiro de híbrido o espero a que sean 100% eléctricos? Porque seguro que salen ahora, en un ratito. Además, siendo un tema tan nuevo prefiero esperar, que las primeras hornadas dan problemillas. ¿Y si sale uno mañana que duplica la duración de las baterías y vuelvo a ser un autentico perdedor? ¿Y si luego las baterías tienen que ser HD?

Por no hablar de quién es el lumbreras que se compra ahora un PC, o una casa, sabiendo que un mes puede costar un 10% menos… Y así una y mil situaciones.

Creo que hemos llegado a un punto de presión (también depresión) en la generación de demanda, que se está consiguiendo el efecto contrario, la contracción. La sensación de que paren esto por favor que yo me conformo con lo que tengo es poderosa. “Oye yo consumo dos vueltas más y me voy a casa”.

Hay que estar a tantas cosas que no estoy a ninguna, me bloqueo… ¡y se me escapan los caracoles! Mi tele obsoleta, mi microondas no gratina, mi vitrocerámica no es de inducción, mi móvil no es táctil, la radio de mi coche no lee mp3, ¡!!!¿pero esto qué es?!!

Este síndrome, este miedo a la obsolescencia (planificada) de lo que compramos seguro que tiene algún nombre tipo BWNV Better-Wait-for-Next-Version. Que en español vendría a ser un “ya-si-eso-lo-vemos-cuando-salga-el-nuevo”. Y mientras la casa sin barrer.

12 Comments ¿Qué opinas?

  1. LLevo un año esperando a cambiar de tele, lo juro. Además la repelente sinceridad de los vendedores es lo que verdaderamente te escayola. -» yo esperaría, porque esta de 40″, en un mes custa 500€»-. Tú confiado vuelves y esa misma tele no vale para nada, -«pero mira esta, todavía es cara, pero en cuanto salga la de 3D será asequible»-
    Por Dios, que alguien pare esto!

  2. En mi opinión, lo que deberíamos hacer es simplemente nuestras necesidades, pensar cuanto tiempo podemos esperar para adquirir el producto que cubra nuestras necesidades y sopesar el precio.

    Y a los vendedores no hacerles ni caso

  3. Es muy fácil, simplemente saber decir NO! La presión de grupo es lo que nos lleva a estas cosas. Desde pequeños no hemos aprendido a decir «no, hasta aquí y no más!» MANRAY no tenia una G12 y hacia fotos estupendas, así que sigue con tu G9.

  4. Gracias Jens…
    SIgo con la G9, pero el influjo, la fuerza y la tentación del video FullHD en una cámara es muy poderosa…estoy luchando..
    P.D: tienes una web impresionante, pero ojo,se te ha colado un mosca. saludos

  5. ja,ja,ja,… me parto !!

    Creo que lo mejor es comprar todo bajo el formato renting… cada X lo cambias por el nuevo y listo !!

  6. Yo no sé si comprarme un nuevo portátil de esos que son minis o seguir con mi dell de hace 8 años.

    Por cierto te cambio la G9 (no eran 8 los países más ricos?) por mi Nikon D40! A toda prueba. Mejor ver (te suena?)

  7. Pero en realidad la vidilla de la tecnología está en esa evolución permanente, aunque no todos los cambios de versión supongan saltos cualitativos en la experiencia de usuario (aquí ya tenemos un criterio)

    Y aunque así sea, si uno ha nacido friki de la tecnología y le gusta estar a la última (qué le vamos a hacer), la prueba ya es una experiencia en sí misma.

    Y a malas, siempre quedará el plan B: hacerte con un amigo-víctima al que le puedas ir soltando lastre a un módico precio, como hace mi amigo Guille, un crack del segundamano.

  8. hay cosas contra las que uno no puede luchar. Ya no me queda cintura comercial para renovarme cada año…

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