Todos, amigas y amigos, nos merecemos un detalle de vez en cuando: un cuidada edición de Matar un ruiseñor, un pacto de investidura, el peso propio transformado en jamón ibérico y, por qué no, el ejemplar en papel de Yorokobu de este mes de marzo (por cierto, puedes hacerte con él aquí).
Cualquiera de esas cosas va a lucir como el sol naciente en primavera porque tenemos un papel de regalo más hermoso que este aguacate embarazado.
Resulta que VIPS nos encargó un diseño para una de las partes digitales de la marca. Nosotros le enviamos a Juan Díaz-Faes porque es asturiano, decente y de buena familia. Díaz-Faes, que es muy de patterns, se puso manos a la obra y a VIPS le gustó tanto la cosa que han decidido utilizarlo para un millón de cosas excitantes en sus tiendas físicas, como el papel de regalo.
El ilustrador explica que quiso reflejar esa idea de que VIPS es la tienda en la que hay de todo. «En Asturias no hay VIPS, así que no lo conocía cuando llegué a Madrid. Por eso, en el dibujo aparece gente con una cámara de fotos, con un regalo amoroso, con comida, con un café… Yo nunca había visto ese concepto de tienda para todo», explica. «Es un dibujo a línea, sin mucho detalle y a un solo color, para no volvernos locos ni contraer mucha pupila».
El diseño de Juan Díaz-Faes es, además, adaptable a épocas y campañas específicas. «Así, en San Valentín se hizo el mismo patrón pero con toda la gente regalando/comprando/usando/llevando cosas en forma de corazón, en lugar del café, cámara, disco… La gente tenía en sus manos corazones. Tan bonito…».
¿Y por qué un patrón? Pues porque al ilustrador ovetense le encanta perderse en su desarrollo pero, sobre todo, porque «sé que la gente descubre detalles cuanto más los mira, y hace que tu trabajo permita una revisión. A mí, además, me motiva para meter pequeños guiños difíciles de apreciar a primera vista pero que pueden ser descubiertos si alguien invierte tiempo. Podrían funcionar a modo de “recompensa” para el consumidor. Se genera un lenguaje creador-consumidor más interactivo,creo, que con una simple ilustración», dice Díaz-Faes.
La mandanga
Una vez visto lo importante, vamos a lo aún más importante.
William Herschel fue uno de los mayores astrónomos de la historia, vivió a caballo entre los siglos XVIII y XIX y señaló el camino por el que discurriría esa ciencia en los años venideros. Explicó por primera vez ideas como la de la expansión del Universo, que la nuestra no es la única galaxia que existe o que la idea de otros mundos habitados es todo menos disparatada.
Alguno de sus hallazgos puede verse en Madrid. Ya estáis tardando.
Los intentos por derribar el castillo del capital han sido tantos como infructuosos y el último se desencadenó con un movimiento global que aunó las protestas del 15 de mayo de 2011 en la Puerta del Sol, en Madrid, Primaveras Árabes y jaranas como Occupy Wall Street, entre otras manifestaciones. Allí, en pleno meollo financiero de los Estados Unidos, el activista anticonsumismo Kalle Lasn y el editor Micah White se apoyaron en una red global de seres inquietos para plantar la semilla de la disidencia.
Su libro, Guerra de memes, es el manual para que los nuevos economistas traten de derribar la economía capitalista.
Grandes insultos de ayer, hoy y siempre (que tú quieras). Este mes, bullshit.
Una historia ilustrada en este mes de marzo que trata acerca de la realidad virtual. Retrofuturismo para lectores de morro fino.
Lee Kuan Yew se había dejado las muelas en convertir Singapur en lo que llamó un «oasis de primer mundo en una región del tercer mundo». Pero en los años 80 emergió una amenaza: la goma de mascar. Mira cómo han acabado en ese país con el chicle.
Los adultos innovadores son, por lo general, unos niños crecidos que, aunque pasan los años y las décadas, nunca han dejado de jugar e imaginar muchas veces de forma completamente estrambótica colores, objetos, ideas, sabores y hasta sus propias vidas. Ese es uno de los secretos de las personas creativas.
Bastante antes de que el periodismo se ejerciese sin moverse del ordenador, algunos intrépidos plumillas se jugaban la vida para conseguir las mejores crónicas. Manuel Chaves Nogales era uno de los mejores.
Caracteres, detalles y bocetos. De eso va esta portada.
La portada de este número nace de la voluntad de poner el foco en la unión de los caracteres, tanto en los primeros, los tipográcos, como en los segundos, los que nos definen como personas. Sus autores son CuldeSac.
