Servidor no es una persona religiosa. Eso no quiere decir que no tenga mis momentos de espiritualidad diaria. En concreto, hablo con Dios todas las mañanas para darle las gracias por no tener la frente de Íker Jiménez. Eso sí, de lo que también carezco es de su capacidad para establecer contacto y relación con El Otro Lado, aunque esto, amigos, tiene solución en ¡INTENNÉ!
A lo largo de los siglos y más allá de que sea todo mentira, el espesor de la línea que separa el mundo terrenal del más allá es tan variable que mientras unos revientan siete ouijas sin obtener la diversión prometida, otros se pasan el día de cotilleo con la tía Mari, que murió en el 92 tras pasarse un pelín con «esos somníferos tan ricos que me recomendó mi cuñado el Manolo».
Estamos en pleno siglo XXI. Somos capaces de construir ciudades ganando terreno al mar para llenarlas de coffee shops en los que ponerse pinocho a base de humo de la risa. Somos capaces de desviar el curso de los ríos en mastodónticas obras para garantizar la ducha mañanera. Somos capaces de poner a un puñado de hadrones a dar vueltas a toda hostia bajo Suiza en lugar de sucumbir a la tentación de utilizar bombas de neutrones en los principales centros financieros del país del raclette. Es decir, somos seres inteligentes, desarrollados y civilizados.
Por eso, es imperativo establecer la normalización en realidades paralelas y mundos etéreos. Hete aquí la iniciativa que conseguirá dicho milagro a través de la herramienta más poderosa para cambiar el mundo: el hamor, es decir, el mashup entre el amor y el humor.
Ghostsingles.com es una web de contactos en la que el protagonista es el amor interdimensional. Si bien el objetivo de la misma es que las relaciones se desarrollen de igual a igual, de fantasma a fantasma, lo cierto es que la verdadera utilidad de Ghostsingles es la de asegurar un -en este caso gélido- abrazo para cuando cerremos los ojos por última vez. El problema es que los vivos no son bienvenidos, así que os sugiero haceros el muerto.
La web, que por supuesto cuenta con versión en español, permite elegir a tu medio ectoplasma utilizando una pequeña pero efectiva cantidad de variables. Cada uno es como es y yo ya tengo una cita sin fecha concreta, espero, con Greatbeyondbabe, una GILF (Ghost I’d Like to Fuck) de 123 años tan tímida que ha sido su hermana quien está manejando los hilos para que nuestro amor llegue, gracias a Caronte, a buen puerto fluvial.
La muerte es, sin duda, un momento de inseguridad, como cambiar de ADSL o elegir el cereal que más se adecua a tu personalidad. Por eso, Ghostsingles ofrece consejos para que la experiencia en el sitio sea totalmente satisfactoria y, por supuesto, para comportarse de manera correcta con otros espectros. Tened en cuenta que la peculiar mezcla generacional que se da en el más allá implica una especial sensibilización con usos sociales de siglos pretéritos.
El sitio web flojea mucho en lo que a diseño se refiere, pero como los lectores de Yorokobu sabrán, cuando un diseñador muere no va al mismo lugar que el resto de fantasmas. Su destino está en una dimensión repleta de cervezas artesanas, bicicletas fixie, tiendas de ropa con no más de 6 prendas cuyo precio medio no baja de 250€ y cafés con Yorokobu en el revistero. La iglesia católica denomina a este lugar infierno, pero los difuntos lo llaman Malasaña.
Hay alternativas al amor
Quien decidió vivir solo y feliz puede, legítimamente, tener el deseo de seguir de la misma manera tras chapar la tapa de su ataúd. Para ello, nada como el infierno (el de verdad, no Malasaña). Y para ir al infierno ningún billete es tan directo como lo es el satanismo.
Que la vida (y la muerte) ofrece distintas opciones es un hecho. Si hay gente que escucha a Robin Thicke, que aplaude a Messi o Fabra en la puerta de un juzgado o que cocina cupcakes, no existe una razón objetiva por la que no se pueda optar por El Maligno para establecer un contrato eterno posvida.
Cualquier ayuda es siempre bienvenida y ser satánico no va solo de escuchar a grupos noruegos de black metal. Discover Satanism ofrece las claves para convertirse en un verdadero satánico y, sobre todo, envía un mensaje de comprensión y aceptación para aquellos que se sienten bichos raros solo por sus filias en lo que a deidades se refiere.
Discover Satanism es una iniciativa de la agencia creativa madrileña China. Es tan buena que os lo aclaramos aquí en letras chiquititas, para que no os enteréis.
