Fue en un barco inglés donde, por primera vez, se pusieron en pie para limpiar el suelo. Acababa el siglo XV cuando en los buques británicos empezaron a enganchar un matojo de lana a un palo para dar lustre a las cubiertas.
En tierra, las mujeres seguían abrillantando el suelo de rodillas. Y así lo hicieron, en España, hasta hace unas décadas.
En el siglo XIX, aparecieron las primeras patentes de lavasuelos con palo. Fue en EEUU. Aquí se registraron más tarde y la primera no fue la más conocida, la actual fregona diseñada por el ingeniero Manuel Jalón.
Cuatro años antes, en 1953, dos mujeres de Avilés, Julia Montousse y Julia Rodríguez-Maribona, patentaron un invento con el título:
«Dispositivo acoplable a toda clase de recipientes tal como cubos, baldes, calderos y similares, para facilitar el fregado, lavado y secado de pisos, suelos, pasillos, zócalos y locales en general»
Poco se sabe de la madre Julia y la hija Julina. No eran ingenieras, pero tampoco hizo falta. Conocieron el ímpetu de inventar dentro de casa (Montousse se casó con un conocido industrial) y también en las aceras de la calle (a Avilés llegó pronto la electricidad y sus fábricas trabajaban de forma impetuosa).
Aquel ingenio no se comercializó. Hubo que esperar a que Jalón volviera de EEUU para producir aquí el primer ‘lavasuelos’. Así lo llamó él. Las mujeres, entonces, se pusieron en pie, como los navegantes británicos, y las Julias cayeron olvidadas por el escurridor de la historia.
Fuente:
Investigaciones de Rosa Millán
Patente número 34.262
Buenas tardes, no es el lugar apropiado para un comentario extenso, así que únicamente quisiera a hacer algunos apuntes.
El registro de las Sras. Montousse no es una patente de invención es un MODELO DE UTILIDAD. No es lo mismo y es importante. Referirse a este registro simplemente como patente fácilmente va a confundir al lector y omite una información valiosa.
Tanto en los modelos de utilidad como en las patentes de invención, lo relevante no es el dibujo ni el nombre, es la descripción que se hace en lo que se llaman REIVINDICACIONES, es decir, la novedad que el autor reivindica como propia.
Si alguien registra un invento para un coche y en el dibujo aparece el coche entero, es obvio que tiene que decir qué es lo que ha inventado. Eso se hace en las reivindicaciones.
Las Sras. Montousse no han inventado lo que aparece en el dibujo.
De hecho hay varios modelos de utilidad anteriores, uno de ellos de otra mujer española (en mi opinión mejor que el de las Señoras Montousse).
La PATENTE DE INVENCIÓN de Manuel Jalón Corominas se ha sometido a dos juicios en los años 1970 y 2009 en los que se buscaba anular la patente de invención en base a la existencia todos los registros anteriores, entre ellos el de las Señoras Montousse, y demostrar que no fué el inventor de la fregona.
Intervinieron peritos expertos y se hizo un análisis exhaustivo de todo lo que existía.
En los dos casos las sentencias fueron nítidas y contundentes.
Por este motivo, Manuel Jalón es el inventor de la fregona, de la primera fregona, por sentencia judicial firme.
Atentamente.
Manuel Jalón Oliveras