El muro de ilustres del cole de Alberite

21 de noviembre de 2017
21 de noviembre de 2017
1 min de lectura

Los niños aprenden los códigos de la vida en el patio del colegio. Ahí es donde se producen los primeros conflictos sociales y ahí es donde comienzan a resolverlos. Ahí es donde eligen con quién ir sin la imposición del compañero de pupitre. Ahí es donde comienzan con el ocio en grupo, que es donde uno empieza a apreciar a las personas que le tocan dentro. Por eso, el patio es tan importante como las aulas y, quizás por eso, es igualmente importante que esos espacios sean inspiración y guía intelectual.

[URIS id=211481]

Resulta que al ilustrador barcelonés Iván Bravo le apetecía trabajar en un colegio. Resultó también que el ayuntamiento de Alberite (La Rioja) estaba organizando su Mazacote Cultural y Bravo estaba allí participando en charlas y talleres. «Al final del verano tenía que entregar una obra que entrara a formar parte del fondo de arte contemporáneo del pueblo. Mi propuesta fue un mural didáctico en el colegio compuesto de retratos de gente relevante de diversas áreas: deporte, cultura, arte, ciencia o tecnología. De alguna manera, fusioné los últimos proyectos que había hecho: un mural didáctico sobre alimentación saludable en un colegio y retratos rápidos que había hecho para no aburrirme en la playa».

Dice Iván Bravo que quiere mostrar a los alumnos los diferentes caminos que tiene la vida, que quiere provocar curiosidad para que conozcan a esas personas del muro y se compongan un mosaico plural de la sociedad que habitan.

[pullquote]Para mí hacer este trabajo es algo así como dedicarme al servicio público[/pullquote]

Llegó el momento de hacer el casting de personajes. «Hice un casting internacional, intentando que hubiera representantes de cada continente; que estuviera equilibrado a nivel de género; y que hubiera personajes de los que, además de sus logros, se pudiera hablar de religión (Muhammad Alí), enfermedad física (Stephen Hawking), enfermedad mental (Yayoi Kusama), etc. Un profesor de la escuela también me dio algunas ideas, puesto que él también usaba personajes célebres para hablar de algunos temas en clase. La idea, más allá de dar diversos estímulos al alumnado, era normalizar la diferencia y hacer un retrato plural de la sociedad para que cualquiera se sienta parte de ella», explica el ilustrador.

La cosa quedó en 28 rostros que, parece, se acompañarán de más en el futuro. «El mural se ha integrado en la vida de la escuela hasta el punto de que algunos profesores y alumnos quieren seguir pintando más retratos en otras paredes del patio. Creo que haremos una segunda fase en 2018».

Parece que, en poco tiempo, Angela Davis, Stephen Hawking, Nelson Mandela, Valentina Tereshkova o Marie Curie dejarán de estar solos.

No te pierdas...