El cambio que busca un mundo mรกs sostenible maneja parรกmetros diversos, que van desde la reutilizaciรณn y reciclaje de materiales, que alargan la vida de los mismos y reducen la producciรณn de residuos, a la elevaciรณn de la making culture (hazlo tรบ mismo) a la altura de dogma de vida. Como el cambio empieza en el jardรญn de casa, una buena manera de pegar el bandazo y declararse a favor de la nueva fe es haciendo la ecocasagatuna. ยฟCรณmo? Con imaginaciรณn y lo que sobre por ahรญ.
Desconozco si escribir un texto con gatos es deontolรณgicamente reprobable. Los gatos y los bebรฉs cuentan con -1 punto por sensiblerรญa en el cรณdigo de todo periodista que se precie. Por suerte, yo no me โprecioโ y, si toca, toca.
La excusa era Giving Shelter, el acto benรฉfico anual que organiza Architects for Animals en Nueva York. La ONG, que se encarga de dar cobijo a gatos callejeros, convoca cada navidad a los estudios de arquitectura para que presenten diseรฑos sostenibles para alojar a los mamรญferos.
Algunos de los participantes fueron RMJM, FXFowle, Gage Clemenceau o H3, pero -atenciรณn a como vienen hilado el tema- el gato al agua (ยก!) se lo llevรณ el proyecto conjunto de Kathryn Walton, creadora de The American Street Cat, y el estudio Co Adaptive Architecture, que convirtieron un cubo con asas en un magnรญfico y confortable apartamento monoplaza para felinos de mediano tamaรฑo.