El amor suele inspirar poemas y novelas, pero raramente sirve de base para un tratado de neurobiología. Eso es lo que propone Lucy Vincent, una aproximación científica, pero amena, al amor. En su último libro, Neurobiología del amor, Vincent arroja luz sobre el sentimiento que garantiza nuestra supervivencia como especie, el «mayor truco de magia de la evolución», como ella lo llama.
Amor pasional, amor platónico, amor romántico… Esta neurobióloga francesa analiza los enamoramientos con la frialdad de una científica, a través de datos, estudios y análisis. Pero lo cuenta con la cercanía de una amiga, de forma amena y divertida. Analiza en este tratado de más de 200 páginas el sentimiento más elevado al que puede aspirar el humano. Pero también de algo tan cotidiano como hacer de vientre (aunque mucho más bonito de contar).
La obra de Vincent explica cómo se produce el torbellino de hormonas, feromonas y mediadores que se activan durante las primeras etapas del enamoramiento y cómo evolucionan a lo largo del tiempo…
¿Qué ocurre en nuestra mente y nuestro cuerpo cuando sentimos una fuerte atracción hacia otra persona? ¿Cómo y por qué se establece una pareja? ¿Cómo y gracias a qué estratagemas psicológicas perdura? Vincent da respuesta a muchas de estas cuestiones en su libro. Y en esta entrevista.
No suelo preguntar a un entrevistado por su vida sentimental, pero en tu caso tengo una buena excusa. ¿Cómo te va en el amor? ¿Es útil conocer los secretos de la neurobiología para entender mejor las propias relaciones?
Gracias por preguntar. Para mí es un prisma muy útil para revisar mis relaciones anteriores y averiguar qué fue mal y por qué. Pero no te protege contra los efectos del proceso amoroso cuando estás inmerso en él.
Cuando estamos enamorados, podemos reconocer los síntomas y entender el proceso, pero seguimos siendo susceptibles a sus efectos. Es como alguien que necesita perder peso pero no puede resistirse a comer un bollo.
Tengo 63 años, me he divorciado dos veces, tengo tres hijos y ahora vivo sola pero con una relación duradera. Sigo en contacto con todas las parejas que han sido importantes en mi vida. Tengo una relación especial y muy buenos recuerdos con todas ellas.
[pullquote]El amor es un truco de la naturaleza y es bueno conocerlo para culparnos menos a nosotros mismos y a nuestra pareja cuando la ilusión llega a su fin[/pullquote]
¿Es más interesante analizar o explicar el amor en la teoría o en la práctica?
Sin saber nada de la teoría, la práctica puede parecer un lío sin solución en el que nos hemos malinterpretado a nosotros mismos o a nuestra pareja. El amor es un truco de la naturaleza y es bueno conocerlo para culparnos menos a nosotros mismos y a nuestra pareja cuando la ilusión llega a su fin.
¿Y cuándo comienza? ¿Qué nos pasa, neurobiológicamente hablando, cuando nos enamoramos?
Para resumirlo, diría que nuestro cerebro cambia y reacciona de forma diferente durante el periodo en el que estamos enamorados. Para entender cómo, ¡escribí un libro entero para describirlo!
En España se dice: «para quien es padre buena está madre», un refrán que viene a decir que las personas suelen coincidir con sus iguales, que las parejas se establecen entre los semejantes. En tu libro señalas que esto tiene una base científica, ¿no?
Sí, se llama emparejamiento selectivo. Tendemos a sentirnos atraídos por parejas que tienen atributos similares a nuestros padres, ¡ya que fueron nuestro primer amor! Como nuestros padres suelen parecerse a nosotros, es cierto que nos atraen las personas que se parecen a nosotros.
¿Se parecen desde el principio o se van pareciendo con el tiempo?
Hay estudios que demuestran que se parecen desde el principio, aunque también con el tiempo, porque una pareja lleva un estilo de vida similar, como la elección de alimentos, el ejercicio, las aficiones y los intereses, así que tienden a igualarse aún más con el paso del tiempo.
Sigamos pasando tópicos y refranes por el filtro de la ciencia. ¿Existe la media naranja?
No creo que haya uno solo, sino varios que cumplan con nuestro criterio subconsciente de selección.
Usted explica el amor y la atracción desde un punto de vista biológico, muy centrado en la reproducción. ¿Dónde encajan las personas homosexuales y bisexuales en todo este esquema?
Encajan exactamente igual que los demás. El sistema se puso en marcha porque proporcionaba una estrategia exitosa para la reproducción. Todos tenemos la estrategia incorporada en nuestros cerebros, ya seamos hetero, homo, trans o asexuales. La tenemos tanto si tomamos la píldora como si no. La tenemos porque nacimos de una larga línea de personas que la utilizaron.
[pullquote]En el mundo actual, la evolución nos está cambiando desde la invención de los anticonceptivos. Creo que el amor como estrategia de reproducción se va a ir perdiendo poco a poco[/pullquote]
En el mundo actual, la evolución nos está cambiando desde la invención de los anticonceptivos. Creo que el amor como estrategia de reproducción se va a ir perdiendo poco a poco —ese fue el tema de otro libro que escribí llamado Où est passé l’amour (¿Dónde se ha ido el amor?)—.
Somos más discretos, pero a la hora de conocernos, asegura que somos un poco como los perros, que nos reconocemos, nos atraemos o nos repelemos a través del olfato: nos olfateamos
A través de los olores y las feromonas, pero también a través de nuestro aspecto: si somos simétricos, si nuestro pelo es brillante y nuestros ojos luminosos, si nuestra sonrisa es atractiva, si nuestra conversación es divertida e interesante… Todo ello son también señales biológicas.
¿Puede esto explicar el amor a primera vista?
Sí, creo que cuando el cerebro encuentra que todos estos signos coinciden con nuestros criterios de selección, podemos enamorarnos muy rápidamente, incluso a primera vista.
¿Y el amor a segunda vista? ¿Cuánto tiempo se necesita para saber que se trata de la persona adecuada?
El amor a segunda vista, como lo llamas, es el más fiable, ya que no depende de la locura que nos produce el cambio de nuestro cerebro. Hay muchos estudios sobre lo que hace que una pareja sea sólida y, básicamente, se reduce a que la pareja se conozca en detalle.
Sigamos con las comparaciones con animales. Los monos se quitan los piojos para fortalecer los vínculos. ¿Cuáles serían los piojos de los humanos?
A esto se le llama grooming. Parece que el grooming en los humanos puede ser muchas actividades, como acariciar y masajear, cepillar el pelo, pero también simplemente hablar: el cotilleo se considera una forma muy efectiva de grooming.
En su libro reflexiona sobre el amor desde el punto de vista de la neuroquímica, ¿está completa sin una explicación sociológica o cultural? ¿Dónde empieza una y otra?
Nuestra sociología es el resultado de nuestra biología. Si nuestra biología fuera diferente, nuestra sociedad estaría formada de otra manera. Para mí, la sociología es un resultado de la biología.
Por ejemplo, ahora se habla mucho de las relaciones abiertas, de las parejas de tres, del poliamor… ¿Qué dice la neurobiología de todo esto?
La biología dice que este tipo de relaciones surgen en casos de superpoblación y de abundancia, y ambas cosas se dan en nuestras sociedades occidentales en este momento.
¿Y los celos? ¿Es una cuestión de machismo o de posesión del otro o tienen una explicación científica?
En mi libro hay mucho sobre los celos. Es un mecanismo para evitar la caza de la pareja y es uno de los signos significativos del amor apasionado. Suelen desaparecer tras los 18-36 meses de amor apasionado y están mucho menos presentes en las relaciones a largo plazo.
¿Qué pasa con las personas que se sienten bien estando solteras? Era mucho más difícil en el pasado que en el presente, y supongo que no tiene nada que ver con las conexiones neurobiológicas
Y por eso esta pregunta está fuera de mi alcance… Aun así, te diré, creo que en parte se puede explicar como una reacción femenina al haber estado bajo el control masculino durante muchos siglos.
Eso hace que ciertas mujeres de la actualidad se sientan más cómodas fuera de una relación, pero probablemente lo compensen con amistades muy cercanas.