«Aquellos que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo».
George Santayana (1863-1952), filósofo y escritor español
Imagina un trasatlántico encallado en las orillas de la M‑30. No, no es una metáfora ilusoria: la Piscina‑Club Stella nació con la silueta de un crucero racionalista y es uno de los lugares con más personalidad de la historia reciente de Madrid. Un hallazgo arquitectónico, social y cultural que marcó generaciones y todavía hoy sobrevive de puro milagro gracias a la protección reglamentaria de una joya tardía.