Que el fin del mundo está muy próximo es algo que hemos asumido en el épico 2020. ¿Has pensado alguna vez cómo quieres que te pille la cosa? El estudio creativo Niiiiice ha creado The End Infusions, las infusiones del apocalipsis. Y ha ilustrado el packaging con propuestas llenas de detalles chanantes.
La iniciativa no ha quedado solo en ejercicio creativo o en propuesta para cliente. Pueden adquirirse de manera real. Borja Pakrolsky, director creativo en la agencia que comparte con Javier Bidezábal, explica que las infusiones «son un producto pensado para consumir en ese último momento de existencia. Por qué paniquear, saquear, intentar sobrevivir, si ya es inevitable. Mejor agarra una taza caliente y palia los nervios disfrutando de este último show».
Las opciones son varias: lavanda e hibisco para fortalecer la dermis en caso de apocalipsis por invasión de avispas asiáticas; vainilla y canela para eliminar las toxinas de una hecatombe nuclear; valeriana y camomila para que relajes a tope en casa antes de que el meteorito esté a punto de arrasar con todo. Un total de seis variedades para satisfacer a los amantes de la catástrofe y del desastre, ya sea natural o provocado.
Actúa sin miedo porque, como explica Pakrolsky, «garantizamos que si el fin del mundo llega antes que tu pedido, te devolvemos el dinero. The End is beginning».
