De los prehistóricos ‘laptops’ a la perfección portátil en menos de 40 años

El futuro va más rápido de lo que crees. Peter H. Diamandis y Steven Kotler eligieron este axioma como título para el libro en el que describen cómo el trepidante avance de la tecnología cambiará el paradigma social y económico de las próximas décadas. Basan tu teoría en lo que pasó en las tres anteriores. Solo han hecho falta unos cuantos años para que dispositivos otrora innovadores los percibamos, más que obsoletos, antediluvianos. 

La imagen del ejecutivo sosteniendo en una mano un maletín, ostensiblemente pesado, y en la otra un tosco teléfono móvil con una larga antena aún está presente, de manera casi cómica, en el imaginario colectivo. Incluso en la de muchos de los que apenas eran unos niños por entonces. 

Pocos apostaban en aquellos año que versiones más modernas de aquellos teléfonos portátiles se popularizarían y se convertirían en lo que son hoy:  elementos indispensables en nuestras vidas. 

Tampoco eran muchos los que atisbaron la vertiginosa evolución de los ordenadores portátiles. Que unos trastos que podrían llegar a ocupar una habitación entera y que tiraban de unas baterías similares a las de los coches se convirtieran en pocas décadas en los dispositivos compactos, potentes y manejables de hoy era, para muchos, algo más propio de la ciencia ficción que de la realidad.

Aquellos mastodónticos aparatos, que apenas podrían competir con una tamagochi actual, no estaban precisamente al alcance de cualquier bolsillo. Sirva como ejemplo el Osborne 1, que con SOLO 11 kilos de peso salió al mercado en 1981 como el primer laptop comercial de la historia al módico precio de 1.800 dólares de la época. Eso, para un ordenador que contaba con un procesador de 4Mhz y una Ram de 64kb. Vamos, como para jugar al Fornite…

Cuarenta años después, la evolución de estos aparatos continúa imparable. Los portátiles siguen ganando en prestaciones a la vez que bajan su peso y tamaño, facilitándonos la vida al poder llevarlos a cualquier lugar y ahorrándonos gastos extras en el fisio. Sobre todo a día de hoy, donde  el teletrabajo convierte cualquier lugar, sea cual sea y esté donde esté, en un potencial espacio de trabajo para muchos profesionales. 

En el caso del nuevo Zenbook 14 OLED, del que podría decirse que está a un paso de alcanzar la perfección portátil. A pesar de su compacto tamaño, de apenas 16,9 mm de grosor y 1,39 kg de peso, su chasis de aluminio alberga la 12ª generación de procesadores Intel Core, gráficos Intel Iris Xe, hasta 16 GB de RAM, unidades SSD PCIe 4.0 de alta velocidad, una batería de larga duración (75 Wh) y la tecnología Intel Wi-Fi 6E, responsable de su excelente rendimiento y conectividad.

Esta nueva iteración de 14 pulgadas del celebrado modelo Zenbook combina, además, los elementos audiovisuales ideales para disfrutar de la mejor experiencia de entretenimiento, como son su pantalla OLED NanoEdge de 16:10, con resolución 2,8K, 90 Hz, 550 nits, validación PANTONE®, DCI-P3 al 100%, certificaciones DisplayHDR True Black 500 y TÜV Rheinland, así como la tecnología Dolby Atmos® y un sistema de sonido certificado por Harman Kardon respaldado por un amplificador inteligente.

El portátil se presenta con un nuevo acabado en la tapa y está disponible en los colores Aqua Celadon y Ponder Blue. También cuenta con una completa interfaz de puertos que incluye dos conectores Thunderbolt 4 USB-C.

Creado juntamente con Intel, el Zenbook 14 OLED cumple con los requisitos del programa Intel Evo tanto a nivel de especificaciones hardware como en capacidad de respuesta, activación instantánea, duración de la batería, carga rápida y colaboración inteligente.

El portátil perfecto está cada vez más cerca.

No te pierdas...