Y entonces… le hizo la cobra

Hace no mucho leí una noticia en la que una chica alérgica a los frutos secos había tenido que ir al hospital porque su novio, tras comerse un sándwich de crema de cacahuete, le había dado un superbeso de tornillo. ¡Qué duro puede ser a veces el amor!
Y es que hay besos que te dejan hecho polvo: los cortos, los de barba saliente, los que sabes que son el último o los de compromiso. Pero hay uno concreto que coge tu orgullo y lo destroza: el beso al aire. Ese que no llega a buen puerto porque se ha tropezado con «una cobra». Ese arqueamiento corporal que consigue el ángulo justo para esquivar tu beso con una perfección digna de contorsionista.
¿A quién no le han hecho alguna vez la cobra? A todos y cada uno de nosotros. Pero tranquilos, porque ha tenido que ser Zovicrem, el tratamiento para el alivio de los síntomas del herpes labial, que te ayuda a volver a besar antes, junto a su agencia BTOB quienes se han propuesto acabar con las temidas cobras a través de su campaña probesos: NO MÁS COBRAS.
http://youtu.be/HLaY9aboxw4
El final de una era que se materializa en www.nomascobras.com, un microsite en el que además de revivir esta situación, ofrece una herramienta de lo más práctica: la aplicación móvil Nomascobras. Una app que te ayuda a distraer a tu víctima para poder darle un beso y evitar las cobras que destrozan tu orgullo.
A esas personas que ya tenían perfeccionadas las cobras… ¿ahora qué? Permaneced atentos al hashtag #nomascobras y sentid cómo el miedo os recorre el cuerpo. ¡Se acabaron los besos al aire!
KEY_VISUAL_2
KEY_VISUAL_3

No te pierdas...