En la mayoría de los casos, los pabellones de exposiciones, congresos o ferias se suelen quedar en el sitio en el que uno los pone. Por lo menos hasta que se demuelen. No es el caso de Ágora Valencia, el edificio que se convertirá en la sede de Valencia Capital Mundial del diseño y que estará situado en la plaza del Ayuntamiento de junio a diciembre. Porque después desaparecerá de la plaza valenciana y volverá a aparecer en la Marina de Valencia .
Un edificio que cambia de lugar es, por lo menos, hoy por hoy, una rareza. Si es verdad que con el desarrollo de la economía circular y la aplicación de sus principios, los edificios desmontables podrían tener cierta importancia en el futuro, pero, por el momento, los ejemplos casi se pueden contar con los dedos.
ESCAPARATE DE VALENCIA WDC 2022
Hay quien conoce la plaza del Ayuntamiento de Valencia porque acoge todos los años la mascletá de las fallas. Otros porque, como su propio nombre indica, en la plaza se pueden encontrar los edificios del Ayuntamiento de la ciudad del Turia. A partir del mes de junio, muchos otros la conocerán por dar cobijo a un edificio que no se parece en nada a los que le rodean.
El pabellón Ágora hará, de junio a diciembre, de escaparate de la Capital Mundial del Diseño 2022. A partir de ese último mes, tras el fin de fiesta del año del diseño valenciano, Ágora se desmontará y se trasladará al que será su destino definitivo, la Marina de Valencia. Allí, incluso después de que Valencia WDC 2022 diga adiós, seguirá siendo visitable.
Desde el momento en que se termine la construcción del espacio hasta que cierre sus puertas en diciembre, el pabellón estará dedicado a alojar más de 200 actividades de las que se plantean en el marco de Valencia Capital Mundial del Diseño 2022. En el pabellón habrá desde conferencias y charlas a talleres y encuentros profesionales en torno al diseño valenciano, sus profesionales, su pasado, su presente y, sobre todo, su futuro.
UN PABELLÓN QUE SE MIRA EN SU ECOSISTEMA
El diseño proyectado ofrece una construcción modular de 350 metros cuadrados de superficie. Ha sido diseñado por el arquitecto y diseñador Miguel Arraiz, en colaboración con el estudio de arquitectura Arqueha Arquitectura y Urbanismo. Todos ellos, por supuesto, valencianos.
El diseño se ha elaborado teniendo en cuenta la necesidad de que fuese sostenible. No es solo una cuestión de materiales. La propia concepción del espacio como una estructura desmontable se apalanca sobre uno de los principios de la economía circular: la reutilización.
Siendo el sector de la construcción uno de los más intensivos en cuanto a consumo de materiales y generación de residuos, la creación de edificaciones que se pueden desmontar garantiza que las piezas empleadas puedan volver a utilizarse. Y así se reduce considerablemente su impacto medioambiental.
Por supuesto, en este caso también ayuda a la mudanza del edificio cuando haya dejado de tener utilidad como sede de Valencia WDC.
OLAS MEDITERRÁNEAS Y LUZ VALENCIANA EN LA PLAZA DEL AYUNTAMIENTO
Para la construcción de Ágora no solo se han elegido unos materiales que hablen de la tradición valenciana, sino que la influencia que se detecta en todo el complejo emana directamente de la tierra sobre la que se levanta.
Desde la enorme pieza de vareta del techo que simula las olas mediterráneas al uso de la luz como un elemento arquitectónico más. Es cerámica valenciana el material elegido para la cubierta del pabellón, en un patrón que esculpirá una luz cambiante para hacerla diferente según pasen las horas del día .
Porque la luz es una de las principales características de la ciudad de Valencia. No es solo que la ciudad compita por ser el epítome mundial de la luz, cara a cara con ciudades como París o Madrid, es que el propio himno de la ciudad deja claro que «Valencia es la tierra de las flores, de la luz y del amor».
Por eso, tiene sentido que, en el edificio llamado a ser la piedra angular de la capitalidad mundial del diseño de Valencia, la luz cobre un protagonismo especial. Así, en el momento en el que caiga el sol en torno al espacio Àgora, se pondrá en marcha la instalación de iluminación artística inmersiva diseñada por el estudio creativo Radiante.
Porque si Valencia es la ciudad de la luz, que lo siga siendo durante las horas de oscuridad parece que es lo más lógico.
El levantamiento del pabellón Àgora forma parte de la agenda de la capitalidad mundial del diseño que ostenta Valencia durante todo el año 2022. Como parte de los eventos organizados para la cita, en el mes de mayo se podrá visitar la exposición exposición ¿Por qué soy así? (hasta el 29 de mayo en el Centre del Carme Cultura Contemporánea), dedicada a desentrañar los motivos que se esconden detrás del diseño de determinados objetos de uso cotidiano.
Además, hasta el 26 de junio, también está disponible la exposición Diseñar el aire (Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí), en la que más de 20 artistas internacionales reinventan el abanico a través de técnicas y materiales tradicionales y contemporáneos.