
Verano y pereza se llevan bien
Decía Sam Keen algo así como que en verano la pereza es respetable. Nosotros añadimos algo más: no solo es respetable, es obligatoria. Esta es la estación del año en la que debemos entregarnos sin remordimiento de conciencia y con total uso de nuestras facultades a la siesta, la fiesta y la molicie en general. A no hacer nada. Nada