El modelo Tama, creado en 1947 por Nissan, fue un adelantado a su tiempo y el primer paso de una senda de modernización que hoy en día se materializa en el nuevo Nissan ARIYA o las tecnologías e-POWER y e-Pedal de la marca nipona.
Para la mayoría de nosotros Japón es sinónimo de fiabilidad y de hacer las cosas bien. También de innovación constante, de una tecnología puntera, pero accesible a todos los públicos, creada mediante un esfuerzo y un perfeccionismo militantes. Se dice que todo lo que termina en el mundo, empieza en Japón.
Un ejemplo de esto podemos encontrarlo en los coches eléctricos. El país del sol naciente fue uno de los primeros en emprender el camino de la electrificación, impulsando el progreso de esta tecnología en respuesta a la escasez de petróleo derivada del final de la Segunda Guerra Mundial.
Tras el conflicto global, el petróleo se convirtió en un bien muy escaso en Japón que, sin embargo, contaba con una producción eléctrica bastante abundante, principalmente debido a las centrales hidroeléctricas. Fue por eso que el gobierno nipón, empeñado en acelerar la modernización de su país, le encargó a la empresa Tokyo Electro Automobile Co., Ltd (que con los años entraría a formar parte de Nissan) la creación de un vehículo eléctrico que pudiera servir a este propósito.
Fue así como nació en 1947 el Tama Electric Vehicle, un automóvil eléctrico pionero, único en aquel momento, con baterías fácilmente intercambiables, que podía alcanzar los 35,2 km/h y que tenía una autonomía de 96,3 kilómetros. Evidentemente, esto parece muy poco si lo comparamos con las cifras que alcanzan los eléctricos actuales, pero el vehículo fue un éxito en su momento y se utilizó principalmente en el sector del taxi durante algunos años.
El Tama se apoyaba en tres valores japoneses que han marcado desde entonces el camino de innovación de Nissan. El primero fue el kabuku, el cuestionar lo establecido: ante la escasez de petróleo, la empresa apostó por una solución rompedora. Por otro lado, el iki, traer lo más innovador y sofisticado al día a día de las personas de forma simple. Y en tercer lugar, el omotenashi, que consiste en ir siempre un paso más allá de lo esperado con soluciones que mejoran la experiencia, que se materializaron en la creación de un vehículo sencillo pero efectivo y práctico.
Y aunque en 1950 las condiciones cambiaron, volvió a haber petróleo disponible y la fabricación del Tama se interrumpió, la investigación de Nissan en electrificación continuó, creando las bases que con el tiempo han dado lugar a los modelos actuales.
Así como el Tama marcó un antes y un después en su época, ahora es el momento del Nissan ARIYA, el primer crossover 100% eléctrico de la marca, desarrollado y manufacturado en Japón, pensado para satisfacer uno de los principales objetivos de la empresa: enriquecer la vida de las personas.
Un buen ejemplo de cómo Nissan lo consigue es el lanzamiento de la tecnología exclusiva e-POWER. Un sistema que rompe paradigmas y que elimina las limitaciones de las motorizaciones eléctricas actuales. Se caracteriza por conseguir una aceleración instantánea y suave, así como un excelente consumo de combustible.
e-POWER supone toda una revolución técnica, ya que es la primera motorización eléctrica que no se enchufa, sino que cuenta con un motor de combustión interna que es el encargado de recargar la batería mientras se conduce. Este sistema, una tecnología única patentada por Nissan que ha llegado este año a Europa, ha tenido un éxito incontestable en su país de origen, donde está disponible hace ya varios años.
La tecnología e-POWER, una solución ideal para aquellos usuarios que no pueden conectar su coche a un punto de carga, es un gran avance hacia la transición ecológica y tecnológica de la electrificación, y constituye un puente para llegar a un mundo full electric, sin sacrificar nada del disfrute y la sensación de libertad que proporciona el acto de conducir.
Otro gran ejemplo sería la tecnología e-Pedal, que simplifica la vida del conductor mejorando, además, la eficiencia del vehículo. El sistema permite conducir utilizando un único pedal.
Para activarlo basta con pulsar un botón. A partir de ese momento, el acelerador del coche permite acelerar, pero también decelerar simplemente levantando el pie del mismo. El sistema aumenta en gran medida la retención del motor eléctrico, que pasa a funcionar como un generador y recupera energía.
El e-Pedal permite simplificar la conducción al no tener que recurrir al pedal del freno, aunque este sigue ahí y se puede utilizar en cualquier momento.
Estos dos sistemas son solo una muestra de todo lo que Nissan ha creado en los últimos años para contribuir a mejorar la movilidad del presente y del futuro, algo que, como hemos comprobado, está impreso en su ADN japonés.
Descubre el nuevo Nissan ARIYA
Nissan estuvo presente en la exposición Japan desu que tuvo lugar en Madrid hasta el mes de diciembre. El evento reunió a diseñadores y a varias marcas, entre las que se encontraba la compañía japonesa de automoción, que representan la vanguardia del país nipón. A través de conferencias, encuentros profesionales y talleres, se mostraron al público sus proyectos en España con el objetivo de dar a conocer la singularidad del diseño en Japón, así como ofrecer las claves de la fascinación que nos despierta.