Parecen piruletas, pero si preguntas al autor de estos dígitos qué quiere contar con ellos, contesta: «Los números están enrollados y enrevesados con los diferentes colores y emociones que nos rodean en la vida misma».
El diseñador, Yenue, estuvo pensando un tiempo cómo convertir esta idea en una numerografía y acabó en un lugar intermedio entre las dos y las tres dimensiones: «Los números están enfocados en una visión espacial en una dimensión 2.5».
Números que apetece chupar

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