Petites Luxures y su antologรญa ilustrada de primeras veces: ยฟQuรฉ recuerdas de la tuya?

Puede que no te acuerdes demasiado de la รบltima vez, porque fue hace tanto tiempo que tu memoria flaquea. O porque, aunque reciente, tampoco fue nada del otro mundo. Pero seguro que recuerdas hasta el รบltimo detalle de tu primer encuentro sexual. ยฟO no?

Las primeras experiencias sexuales suelen ser especiales, para lo bueno o para lo malo. A veces, son los caprichos de la memoria los que las idealizan, obviando los momentos mรกs embarazosos. O son precisamente esos los que lo convierten en inolvidables, aunque no siempre en el mejor de los sentidos.

 

Simon Frankart, mรกs conocido en el mundo de las redes sociales como Petites Luxures, ha recopilado 50 de esas historias y las ha reunido en El libro de las primeras veces (Cinco Tintas), una antologรญa ilustrada de esas primeras experiencias tan difรญciles de olvidar. 

ยซPedรญ a mis seguidores en Instagram que me contaran, en pocas palabras, el lugar donde tuvieron su primera experiencia sexual. Recibรญ mรกs de 500 respuestas de todo el mundo por correo electrรณnico. La mayorรญa se extendieron mรกs de lo que pensaba, pero detrรกs de cada una de las reseรฑas habรญa una historia increรญble, por lo que resultรณ muy difรญcil quedarse solo con 50ยป.

Simon-Franckart

De hecho, al autor le resulta imposible elegir una de esas historias cuando se le pregunta por su favorita. ยซLo รบnico que puedo decir es que he tenido la suerte de conocer a la pareja protagonista de una de las historias (la que aparece en la pรกgina 90 del libro). Son personas increรญbles y me sentรญ muy orgulloso cuando me dijeron que la historia que dibujรฉ a partir de su relato es exactamente igual a los recuerdos que ellos guardan de aquel primer encuentroยป.

Algunas de las experiencias compiladas en la antologรญa de Petites Luxures cuentan historias como estas:

. ยซLo hice por primera vez a los diecisรฉis aรฑos. Vivรญa en un bonito pueblo rodeado de bosques en los meandros del Marne. Pasaba mucho tiempo al aire libre. La primera vez que hice el amor, fue en una cabaรฑa en el bosque, cerca del Marne. Hacรญa buen tiempo y escuchaba la naturaleza que me rodeaba, mientras los rayos de sol entraban por los resquicios de la cabaรฑaยป.

. ยซFue al final de la vendimia, en la parte trasera de una Citroรซn C15 (blanca) sobre una lona (azul) que me rascaba las nalgas. Ahora tengo cierta debilidad por las C15ยป.

ยซA riesgo de hablar de peras y manzanasโ€ฆ Aparcรณ su viejo dos caballos color crema al borde de un huerto, justo a la sombra de un manzano. El verano llegaba a su fin, el sol se ponรญa y el aire olรญa a azรบcar, tierra y fruta รกcida. Pasamos al asiento de atrรกs y me puse encima de รฉl. Estรกbamos tan asustados como excitados, pero por suerte cayeron un par de manzanas sobre el capรณ, nos echamos a reรญr y la tensiรณn se disipรณ. Fue mรกgico. Jamรกs olvidarรฉ esa primera vezยป.

ยซFue detrรกs de un coche, cerca de la playa. Fue tierno, pudoroso, titubeante y un poco doloroso. Es cierto que no ha sido la mejor, pero sรญ fue la primera vezยป.

Ilustraciรณn por

Petite Luxures

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Patrick Thomas

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