Para que haya corrupciรณn en las clases bajas es necesaria la corrupciรณn en las clases altas. La corrupciรณn en las clases bajas tiene que ver con la subsistencia, y es una respuesta a la corrupciรณn de las clases altas, cuyo objetivo es el enriquecimiento. Esta idea se refleja en una secuencia de The Shield (cap. 1ร12) que muestra a tres hombres en una habitaciรณn; cada uno de ellos representa un estadio distinto de la corrupciรณn: desde la supervivencia al enriquecimiento.
La puesta en escena hace posible trazar una lรญnea de โevoluciรณnโ del Homo Corruptus, desde el que se arrastra hasta el que permanece estirado, el Homo Corruptus Erectus, caracterizado por traje y corbata caros y la mirada siempre arriba.
Antecedentes
El capรญtulo comienza con Jesรบs Rosales y Tony Nuรฑez, chicos de barrio que trapichean con droga, poca cosa, para pasar los dรญas. Maldad alimenticia. Tony pasa la mercancรญa al cliente -un tipo que no baja de un coche- mientras Jesรบs observa a distancia, con el arma a punto; nunca se sabeโฆ Cuando Tony cobra se encamina hacia Jesรบs, pero no cruzarรก la calle porque un coche de importaciรณn lo atropella y lo mata.
El conductor del coche es el subcomisario Ben Gilroy, un tipo que ampara las actividades delictivas del detective Vic Mackey y su grupo anticorrupciรณn. Gilroy teme que Jesรบs Rosales declare y acabe con su carrera, y obliga a Mackey a atrapar al chico. Mackey no puede eludir el encargo porque si Gilroy cae, tambiรฉn caerรก.
Mackey obliga a punta de pistola a Jesรบs a asistir a una reuniรณn con el subcomisario.
Tres grados de corrupciรณn
La reuniรณn se convierte en una exposiciรณn de los tres grados de corrupciรณn con una puesta en escena sencilla y diรกlogos funcionales.
La corrupciรณn de subsistencia
Jesรบs Rosales en una vieja silla representa a la parte mรกs deprimida de la sociedad, sin capacidad de decisiรณn sobre su vida.
Los tipos como Rosales no pueden cuestionar la moralidad de sus acciones porque viven al dรญa. Se encuentra en el estadio mรกs bajo de la subsistencia y en su caso las opciones se reducen al menudeo de droga.
La corrupciรณn de la clase media
Vic Mackey estรก unos peldaรฑos por encima. Representa la corrupciรณn de clase media, en esta caso amparada por placa y pistola. Aunque Mackey tiene una vida acomodada gracias a negocios fuera de la ley, tiene ciertos escrรบpulos. Entre ellos, no hacer daรฑo a los inocentes o a pobres diablos como Rosales.
Mackey es el corrupto que mira con desconfianza abajo y con desprecio arriba, al polรญtico, al poderoso.
Mackey pretende ganarse el silencio de Rosales, no comprarlo ni amenazarlo. Sin embargo, Mackey estรก limitado por el subcomisario. Se mueve por la escena como un mono de feria con una cadena de la que tira el subcomisario.
La corrupciรณn de traje y corbata
El subcomisario Ben Gilroy representa la corrupciรณn de los trajes y las corbatas, de los coches de gama alta de los 5.000 euros mensuales en luz y agua. Es posible que sea una pieza de un engranaje que comienza por algรบn polรญtico en la capital. En todo caso, en esta escena es la mรกxima autoridad en la corrupciรณn: El Homo Corruptus Erectus.
Gilroy, a diferencia de Mackey, jamรกs se inclina hacia adelante y apenas se desplaza โen la lรญnea del malo hitchcockniano clรกsico, aunque con menos claseโ. Su prepotencia puede mรกs que el miedo. Estรก convencido que de alguna manera acabarรก el asunto a su favor.
Gueto para unos, riqueza para otros
Lo que el subcomisario no sabe โaunque poco le importarรญaโ es que Rosales es una de sus vรญctimas mucho antes de entrar en la habitaciรณn. Rosales es hijo de uno de los barrios mรกs deprimidos. Una zona que el subcomisario se encarga de convertir en gueto retirando las unidades policiales porque sirve a varios propรณsitos: el gueto es un caldo de cultivo de clientes y abarata inmuebles que pueden ser comprados para la especulaciรณn. En un barrio donde es imposible establecer negocios legales, el trapicheo se convierte en una forma de vida. Droga que tipos como Mackey ha puesto en el mercado con el consentimiento de tipos como el subcomisario que bloquea comisiones de investigaciรณn y mueve fondos a las Islas Caimรกn.
Sin embargo, Shawn Ryan, el creador de The Shield, no alecciona a los espectadores. Simplemente encierra a los personajes en la habitaciรณn y pone en boca de ellos diรกlogos funcionales: โPodemos ayudarte, Jesรบsโ, โToma mi telรฉfonoโโฆ
Mucho despuรฉs de haber visto el capรญtulo es posible comprender el desasosiego que produce la escena y la grandiosidad en lo sencillo. Una escena que sintetiza de The Shield y es metรกfora de la sociedad contemporรกnea.
