David G. Ortiz

Los arrepentidos inventores de las cosas que más odias de internet

De inventores que se horrorizaron de su propia creación años más tarde, tras ver las consecuencias, la historia está repleta. Nobel, arrepentido padre de la dinamita; Einstein, que escribió a Roosevelt para aconsejarle acelerar el desarrollo de la bomba atómica (y luego lo lamentó); Kalashnikov, que preferiría haber concebido un cortacésped, como él mismo confesó años más tarde… En definitiva,
14 de febrero de 2016

Ciudadano cíborg

A efectos legales, los robots son una propiedad inanimada en manos de empresas o particulares. Son simples máquinas diseñadas y fabricadas por humanos, menos inteligentes que las personas, sin emociones propias, que