Quizá te estés planteando comprar un coche. Puede que estés haciendo números para ver cuál encaja en tu presupuesto. ¿Pero y si te estuvieras olvidando de otro cálculo más importante? ¿Sabes realmente cuánto te cuesta mantener un coche? ¿Y las emisiones de CO2 que estarías ahorrando si recurrieras al carsharing?
Según distintas estadísticas, los vehículos privados pasan más del 90% de su vida aparcados. Tan solo se aprovecha el 10% de su vida útil. Y, sin embargo, pagamos por el coche como si lo usáramos continuamente. A esto hay que añadir el gasto en carburante y energía, más ahora que los precios han subido dramáticamente debido al incremento de la inflación y de la guerra en Ucrania. Tanto es así, que llenar o recargar un vehículo eléctrico es, de media, entre un 35 y un 500% más caro que hace un año.
«Seguramente nos sorprenda darnos cuenta de los gastos fijos anuales que supone tener un coche y, por otro lado, la cantidad de horas que pasa nuestro vehículo absolutamente parado y sin uso», afirma Pilar García, CMO de Zity by Mobilize, la empresa de movilidad compartida presente en ciudades como Madrid, París, Lyon y Milán. «Las personas que hacen un uso esporádico o moderado de sus vehículos son a quienes más les puede beneficiar pasarse al carsharing», concluye.
Por eso han creado la Calculadora de Ahorro Zity, un comparador online con el que la compañía pretende concienciar de las ventajas de este servicio y del ahorro de costes y emisiones de gases contaminantes que supone.
«Nuestro propósito como compañía es mejorar la vida en las ciudades ofreciendo una movilidad asequible, justa y segura que reduzca el impacto en el medio ambiente», explica Javier Mateos, CEO de Zity by Mobilize. «Dentro de ese compromiso, ponemos a disposición de la ciudadanía esta sencilla herramienta digital que les permite conocer no solo su posible ahorro económico, sino también cómo contribuiría a mejorar la calidad del aire en su ciudad».
El funcionamiento de la Calculadora de Ahorro Zity es sencillo y solo lleva cinco minutos. El sistema propone una serie de preguntas relacionadas con movilidad y hábitos de conducción, como el coste fijo del coche privado (lo que gasta el usuario en el mantenimiento de su vehículo, en gasolina, en el pago del seguro, del parking, etc.) y los hábitos de desplazamiento (la frecuencia y duración diaria, cuántos viajes largos se realizan con el coche…). Y en función de las respuestas, se obtiene el resultado: la cantidad de dinero y de tiempo de desplazamiento que se traducirá en un presupuesto Zity. Junto a ello, el usuario podrá conocer las emisiones de CO2 que evitaría a la atmósfera si utilizara el carsharing.
A partir del resultado, se obtiene la comparativa. Para el cálculo, se utiliza el tiempo real de uso y los gastos declarados por el usuario con el coste por minuto de conducción medio de Zity en la ciudad elegida. El objetivo es contribuir a conseguir los objetivos de desarrollo sostenible a largo plazo.
Pero no son esas las únicas ventajas. «El carsharing contribuye de forma directa a la eliminación de vehículos en la vía pública y, por ende, a la reducción del tráfico y mejora de la circulación», abunda Pilar García. «En concreto, el carsharing de Zity, que solo usa vehículos eléctricos, también contribuye a mejorar la calidad del aire y la reducción del ruido al ser coches 100% eléctricos y 0 emisiones».
La calculadora estará disponible en los países donde Zity opera actualmente: Francia, Italia y España. En este último, además, estará presente en la Semana de la Movilidad Sostenible que se celebrará del 16 al 22 de septiembre en Madrid. Su intención es acercar a la ciudadanía el uso del carsharing a través de distintas acciones que tienen como objetivo ayudar al usuario a familiarizarse con el uso de vehículos eléctricos y adaptar su conducción y comportamiento a las condiciones de estos. De esta manera, se lograría una transición más rápida a vehículos de tecnologías sostenibles.