El escándalo de las preferentes y la venta de otros productos tóxicos hizo que la imagen de los bancos cayera como jamás lo había hecho a ojos de los consumidores. Esa etapa de turbulencias en el sector bancario que afectó a tantas personas fomentó la desconfianza entre clientes y bancos.
Sin embargo, también ha favorecido un incremento de la cultura bancaria en la sociedad y con ello, la posibilidad de tomar decisiones cada vez más conscientes sobre qué es lo que buscamos en un banco. En palabras de Joan Antoni Melé, promotor de la banca ética y miembro del Consejo Asesor de Triodos Bank, «es ahora cuando deberíamos estar plantando las semillas de un futuro más sostenible y responsabilizarnos de nuestras decisiones, como es la elección del banco con el que queremos trabajar». Y subraya: «Si realmente queremos cambiar algo, en el momento de esa elección es fundamental que, además de pedir liquidez, rentabilidad y seguridad a nuestro banco, no dejemos de preguntarnos qué va a hacer con nuestro dinero, si de verdad queremos que el mundo sea un buen lugar para vivir».
Hablar de banca ética ya no suena a algo pensado para unos pocos. Y esto es lo que ofrece Triodos Bank. En 2009 cofundó la Alianza Global para una Banca con Valores, a la que pertenecen 28 entidades financieras de todo el mundo. Su objetivo es hacer banca apoyando la economía real y poniendo en equilibrio la viabilidad económica con el beneficio para la sociedad y el medio ambiente.
«Ahora más que nunca es el momento de impulsar un número mucho mayor de iniciativas y empresas a favor de una economía real más sólida y sostenible», afirma Mikel García-Prieto, director general de Triodos Bank. «Hemos demostrado que se puede hacer banca de otra manera, de forma transparente y con responsabilidad», añade.
Lejos de lo que la mayoría pueda pensar, para García-Prieto la función de un banco no es maximizar sus resultados financieros, sino ofrecer un servicio público esencial. Según el tipo de negocios a los que se preste dinero, los bancos están promoviendo un tipo de sociedad u otra. Sin embargo, Triodos Bank busca un balance entre el bienestar de las personas, el impacto ambiental y la rentabilidad financiera.
Joan Antoni Melé opina que un buen banquero es «alguien que gestiona de forma responsable el dinero de los ahorradores, permitiendo con ello que actividades empresariales con valor para la sociedad puedan seguir adelante y con una idea siempre en mente: que el dinero no es nuestro y debe ser devuelto a quien lo ha confiado». Y esa es la base sobre la que se debe construir cualquier actividad bancaria: la confianza.
«Muchas cosas han cambiado», concluye Melé, «y la buena noticia es que tenemos en nuestras manos más herramientas que nunca, como la banca ética, para construir y compartir una economía al servicio de las personas».