Ahรญ estรกn los equipos de I+D de las grandes empresas automovilรญsticas trabajando duro y dรกndole vueltas a la cabeza para crear el coche del siglo XXII. Uno que sea limpio, eficiente, de bajo coste y que utilice energรญas renovables. Mientras, un empresario de Melbourne (Australia) llamado Steve Sammartino y un veinteaรฑero rumano con ciertas dotes para la ingenierรญa autodidacta, Raul Oaida, pasaban las horas muertas chateando entre ellos por internet y jugando con sus viejas piececitas de Lego. Cuando se dieron cuenta, habรญan inventado un automรณvil del futuro.
Lo que han desvelado a la humanidad, a fin de cuentas, es que llevamos 65 aรฑos comprando las piezas encajables que hicieron internacionalmente famosa a esta juguetera danesa sin darnos cuenta de lo que tenรญamos entre manos. Si las utilizan los bebรฉs, se pueden asfixiar. Eso lo tenemos todos claro, pero, ยฟy si las utilizan los mayores? โEntonces se pueden hacer cosas increรญbles, cosas no solo para jugar, sino para mejorarโ, dicen los creadores. Su invento, Super Awesome Micro Project, es el paradigma de tal afirmaciรณn.
โSe trata de un coche de carrerasโ, dice con sorna Sammartino, โprincipalmente porque los coches de carreras son coolโ. En realidad su prototipo no lo han puesto a mรกs de 30 kilรณmetros por hora, segรบn ellos, โpor temor a una Legoexplosiรณnโ, pero el hito de su trabajo no es precisamente la rapidez del cacharro.
Chapa, puertas, asientos, volante, marchas, motor y absolutamente todo a excepciรณn de las ruedas y el soporte de la estructura estรก construido a partir de piezas estรกndar de Lego. Ladrillito a ladrillito, fueron capaces de crear para la mรกquina cuatro motores orbitales (que componen el motor principal) y un total de 256 pistones para hacerlo funcionar exclusivamente con la alimentaciรณn de aire. Sin combustibles de por medio. En total, medio millรณn de piececitas de juguete que componen centรญmetro a centรญmetro el vehรญculo.
A la estructura externa en general no le dan demasiada importancia porque โes algo artรญsticoโ, pero respecto al funcionamiento, por si le interesa a algรบn ingeniero, Oaida revela que la manera de conseguir que los pequeรฑos pistones desmontables tengan la fuerza suficiente para mover un coche no es difรญcil. Simplemente se trata de โdisponerlos de tal manera que todos actรบen en el mismo eje de trasmisiรณn, como filas de pequeรฑos hombres empujando un molino giganteโ, cuenta como si todos anduviรฉramos construyendo superbรณlidos con piezas de a milรญmetro.
Estos dos emprendedores se conocieron por internet. Despuรฉs de un tiempo planeando su idea, decidieron que habรญa llegado la hora de ponerse โa jugarโ con ella. Sammartino pensรณ que el mejor mรฉtodo era crear una start-up, y con esa idea, escribiรณ un mensaje en su twitter que decรญa: โยฟAlguien interesado en invertir 500 โ 1000 dรณlares en un proyecto que es impresionante y primicia mundial? Se necesitan unos 20 participantesโ.
Al final fueron 40 inversores los que creyeron en el reto. El invento โfue construido en Rumania y enviado a un lugar secreto en los suburbios de Melbourneโ, dicen para ocultar irรณnicamente el paradero de su mรกquina espacial.
โTan solo hubo que utilizar las piececitas de juguete que hemos usado toda la vida para construir un vehรญculo รบtil, autรณnomo y que no genera ningรบn tipo de emisiรณnโ, conciencia el creador. Segรบn su versiรณn, los inversionistas pusieron dinero para su idea despuรฉs de leer un documento que รฉl mismo habรญa redactado tras el mensaje de Twitter. Puso un sello rojo encima de las letras de ese pliego: โPara humanos avanzadosโ, decรญa el estampado.