La regla del micropene, la misteriosa esvástica del bosque y el patrón de los feos

Le hemos cogido el gusto (y también vosotros, con un poco de suerte) a esto de buscar curiosidades en la «enciclopedia libre». Si observas detenidamente, entre las páginas y páginas de contenido se encuentran historias fascinantes como los inicios de James Blunt en el baño de la princesa Leia, el día que Reagan prohibió Rusia o las cartas que Tolkien escribió a sus hijos en nombre de Papá Noel. ¿Quieres saber en qué consiste la regla del micropene? En breves instantes… ¡Pasen y vean!

El diablo español que se encendió el primer cigarro

Entre los marineros que viajaron con Cristóbal Colón a las Américas en 1492 se contaba el onubense Rodrigo de Jerez, tripulante de la Santa María, considerado el primer fumador europeo de la historia. En octubre de aquel año, los nativos mostraron el tabaco a los conquistadores en la isla de Guanahani (rebautizada como San Salvador); un mes más tarde, De Jerez y Luis de Torres aprendieron a fumar en Cuba.

Cuando regresó a España en 1493, nuestro protagonista había adquirido este hábito y lo introdujo en su Ayamonte natal. Los vecinos lo delataron y la Inquisición lo encarceló porque «solo el diablo podía dar a un hombre el poder de sacar humo por la boca». Siete años después, cuando fue liberado, la pésima costumbre de fumar ya se había popularizado.

Tengo que perder unos batmans…

Una unidad de masa utilizada por los turcos durante el Imperio otomano y el Imperio ruso, así como en algunas regiones de Asia central, se llamaba como el héroe de Gotham. Su valor era distinto en cada sitio, así que es muy difícil determinar a cuántos kilos equivale un caballero oscuro (lo mismo que sucede con Christian Bale, el actor que da vida al personaje, un hombre metódico que ha ganado y perdido mucho peso a lo largo de su carrera).

Café con leche cósmico, el color promedio del universo

La suma del color de todas las luces del universo es el cosmic latte (café con leche cósmico), una tonalidad a medio camino entre el blanco y el beis descubierta en el año 2002 por un grupo de astrónomos de la Universidad John Hopkins. El nombre se le ocurrió a un científico mientras tomaba un café en Starbucks leyendo la noticia en el periódico. Por si quieres probar en Photoshop, su código hexadecimal es #FFF8E7.

La regla del micropene

Digamos que eres escritor y quieres incluir en tu novela, como personaje, a un tipo que te cae malamente. Si la descripción que realizas es muy concienzuda, de tal forma que el lector no tenga problemas para vincular a la persona real con la ficticia, podrías enfrentarte a una demanda por difamación. ¿Cómo evitarlo? Haciendo que el correlato literario de tu némesis tenga un pene vergonzosamente pequeño. Jamás admitirá en un juicio que el parecido es innegable.

El humancé del camarada Stalin

Cuentan que el biólogo soviético Ilya Ivanovich Ivanov realizó una serie de experimentos a principios del siglo XX para pergeñar un híbrido entre humano y chimpancé (un humancé) a través de la inseminación artificial de una mujer con semen de simio. También se dice que Stalin encargó el engendro, convencido de que se convertiría en el soldado perfecto (si bien podría ser un mito). Gran fuerza y poco seso, ideal para ser manipulado y controlado por el régimen. Afortunadamente, no logró que prosperase un embarazo.

La misteriosa esvástica del bosque

Un empresario filonazi la mandó diseñar en 1938 como regalo de cumpleaños para Hitler. 55 metros cuadrados de alerces en medio de un pinar que cambian de color durante unas pocas semanas cada año, en otoño y primavera, haciendo que el símbolo del Tercer Reich destaque en amarillo sobre el fondo verde. Por su carácter efímero, pasó desapercibida durante toda la dominación soviética de la Alemania del Este.

Tras ser descubierta en 1992, ya con el país reunificado, las autoridades del estado de Brandeburgo trataron de borrar la esvástica talando 43 de los 100 alerces que la componían, pero el signo era aún reconocible. Años más tarde se arrancaron 25 árboles más.

San Drogón, de los feos el patrón

El bueno de Drogón nació en Sebourg (Francia), en el seno de una familia noble. Perdió a su madre en el parto y a su padre cuando era adolescente. Jamás dejó de culparse por el fallecimiento de su progenitora, así que dedicó su vida a hacer largos viajes como penitencia. Hasta diez veces se desplazó a Roma. Durante una de sus travesías, a los 26 años, contrajo una enfermedad que le dejó inmovilizado y deformó drásticamente su rostro. Avergonzado por su aspecto monstruoso, se encerró en una celda y vivió allí, solo y confinado, durante cincuenta años. Es venerado como el santo patrón de los pastores, del café y de las personas que la gente encuentra repulsivas.